La actividad de producción de energía eléctrica a partir de fuentes de energía renovables, cogeneración y residuos reviste una importancia fundamental en la consecución de los objetivos de mejora del medio ambiente, seguridad del abastecimiento energético y desarrollo tecnológico e innovación.
Durante los últimos años se ha producido un desarrollo muy importante de las tecnologías de producción de energía eléctrica a partir de estas fuentes.
Este crecimiento ha sido posible, en parte, gracias a la existencia de sucesivos marcos normativos de apoyo que establecen incentivos económicos a la producción de energía eléctrica con estas tecnologías.
Actualmente existen dos marcos de apoyo principales: el régimen retributivo específico y el régimen económico de energías renovables.
- El régimen retributivo específico se regula en el Real Decreto 413/2014, de 6 de junio, y se otorga mediante subastas de potencia en las que se puja por una retribución.
- El régimen económico de energías renovables se regula en el Real Decreto 960/2020, de 3 de noviembre, y se otorga mediante procedimientos de concurrencia competitiva en los que la variable de oferta es el precio por unidad de energía eléctrica, y el producto que se subasta es potencia instalada, energía eléctrica o una combinación de ambas.
Hay que señalar que existen otros mecanismos de apoyo a las energías renovables, como las líneas de ayudas a la inversión en renovables térmicas y eléctricas cofinanciadas con fondos de la Unión Europea, que gestiona el IDAE.
También, y cada vez más, se construyen instalaciones que no reciben apoyo, y que participan libremente en mercado en alguna de las formas que contempla la normativa del sector.